viernes, 24 de octubre de 2014

El Último Beso

…aquel viaje fue el último…esta estación sin vacaciones, sin verano, sin octubre… …aún me estremece esa última noche, cómo lloré su cuerpo desnudo…el olor de sus manos en mi piel… -No puedes despedirte de alguien que ya se ha marchado-me decían, y llené mi maleta de ropa, de bolsas,  entregando mi corazón suicida al último tren…viajé para despedirme o para luchar, a día de hoy creo que fue para batallar en el adiós y no arrepentirme de no haberlo intentado al menos… …podría explicaros qué pasó, pero todos conoceis  la historia…Barcelona gritaba -va marxa lluny del meu abast i sempre estara el meu cor... - …la banda sonora de aquellos días y noches…-És de nit…Sense tu 

…verbalizar lo que siento, buscaba respuestas y no conocía las preguntas…y cuando las supe no encajaban en mí…así tanto como ella…
…recuerdo la azotea, el sol…lo de ser alguien como el resto o ser alguien más…incrédula de mí, recuerdo como tu voz pronunciaba  Necesito en aquella cafetería (in)justa…y que apuñalabas tu confianza en mi capacidad de cubrirla de llenar(te) de completar(te)…
…luces de noche, música de fuente, sentadas en las escaleras que sostenían nuestros abrazos pero no subían a ninguna parte, sólo bajaban hacia el suelo…hacia mí…los pasillos de los museos, las comidas, los pasos, los últimos baños, el último masaje, el último capítulo de Anatomía de Grey en un apartamento de alquiler dónde se asesinaron mis esperanzas, dónde fregaron mi arrastre… el último ¡¡¡-Házme el amor o Échame un polvo…pero ven!!!

Tú sonrisa y tus pérdidas espaciotemporales y mi afán por encontrarte o que nos perdiéramos allí en aquel parque de pinturas, …las alturas de un castillo que se hizo de arena después de fotografiarme en las nubes…las tizas del lavabo de un museo erótico…el piropo del mendigo de Les Rambles sonriendo a nuestras manos entrelazadas…el tamaño de un león ansioso…el mar mediterráneo debajo…la arena de la playa en tu toalla…el chocolate de tus labios…y las cosquillas de silencios llenos de complicidad…
…puede que eche de menos a esa persona o añore esos momentos a oscuras que ya nadie ilumina…que memorice las fechas que no cicatrizan mis heridas porque aún están abiertas…que tú seas mi alcohol preferido para que escuecen y no curen…no ofrezcas oxígeno…sino vas estar aquí para respirar(me)…


…hace 365 días ella dormía en mi hombro y yo deseaba que ese tren no llegase a su destino nunca…pero paró, se despertó como si nada…como si lo que durase ese trayecto no significase absolutamente todo aquello que se perdía y rompía en mí cuando la miraba…y yo sabía que sería la última hora de mi vida…la última vez que soñaba despierta…cogimos las maletas y te supliqué: -Déjame acompañarte a tu casa…- pero habíamos llegado, era real…nos abrazamos como quién agarra una cosa sin insistencia por miedo a quedarse allí, pasivas… …dimos la vuelta, cada una a su camino…ese que quizás nunca  vuelva a cruzarnos…y me giré una última vez…observando su espalda…la última vez que la besé era una tarde de octubre…dónde descubrí a qué saben “los labios que saben  despedida…”


Vuelve

No hay comentarios:

Publicar un comentario